Tarima flotante: características y tipos

Tarima flotante

La tarima flotante es una forma de pavimentar que se ha hecho muy popular en los últimos años, sobre todo por su fácil instalación. Eso sí, hay diferentes tipos, por lo que puede no ser fácil conocer la mejor opción a elegir.

En este artículo vamos a conocer más en profundidad a la tarima flotante, mostrando los tipos de tarima, así como sus características ¡Empezamos!

Características de la tarima flotante

Aunque la creencia popular sobre la tarima flotante es que se trata de un tipo de suelo, en realidad se hace referencia a un tipo de instalación. Por ello, hay que saber qué es una instalación flotante.

Esta forma de instalar pavimento se caracteriza por que no está fijada al suelo. No aparecen colas, clavos, adhesivos, ni ningún sistema de esta índole. Gracias a esta forma de instalación, el material se puede mover de forma natural, con sus contracciones y dilataciones.

De hecho, la tarima flotante cuenta con las llamadas juntas de dilatación, que deberán ser cubiertas por los rodapiés o los zócalos. Además, también hay que colocar un aislante en la tarima, que puede generar beneficios extra, como la posibilidad de usar calefacción radiante, o aislar nuestro hogar de ruidos.

Tipos de tarimas flotantes

Aunque la tarima flotante sea una instalación en sí misma, hay una serie de suelos que se instalan de esta forma; de ahí que nos refiramos a dichos suelos como tipos de tarimas flotantes.

Suelos laminados

Como su propio nombre indica, está en formato de lámina. Consiste en una tabla formada por un núcleo de fibras prensadas, a la que se le añaden algunas capas más, como la capa de desgaste, la capa compensadora y el papel decorativo, para aumentar su durabilidad y mejorar su aspecto final.

Este suelo tiene una gran variedad de diseños, calidades y prestaciones, por lo que es un opción interesante a tener en cuenta, pero que también hay que vigilar para evitar estafas.

No obstante, hay que decir que no aguanta bien el efecto del agua. Eso sí, las versiones premium de estas tarimas presumen de controlar mejor este problema.

Suelo de madera maciza

Esta tarima está formada por madera maciza, que puede estar distribuida en una pieza única o en diferentes capas.

Este suelo también tiene diversas tipologías y propiedades en función de la madera que se use. Así, podemos encontrar modelos más atractivos, y otros que resistan mejor la humedad, con su correspondiente cambio de precio.

Suelos vinílicos de clic

Este suelo también esta en formato de lámina. No obstante, su diferencia con el anterior es el material que lo forma, ya que en la mayoría de casos se trata de PVC.

Hay algunos suelos vinílicos que se pegan, razón por la que se específica a aquellos que son de clic como tipo de tarima flotante.

La principal ventaja que tienen es su resistencia a la humedad. No obstante, su principal inconveniente es que no aguantan la acción del sol. Puedes encontrar más detalles sobre los suelos vinílicos en el artículo que dejamos enlazado.

Conclusiones finales

Como has podido ver, la tarima flotante es una alternativa muy interesante para pavimentar nuestro hogar. No obstante, puede que tengas dudas sobre la pavimentación, ya sea de tu hogar, o de otro inmueble. Pero no hay razón para preocuparse; te podemos ayudar.

Si tienes alguna duda sobre el suelo que deberías poner en tu casa o en otro inmueble te podemos ayudar. En Tenada Nueva somos expertos en ejecución de pavimentos. Contacta con nosotros y pide presupuesto. Estaremos encantados de ayudarte.